Muchas empresas suelen emplear productos químicos para el desarrollo de su actividad, ya sea para su quehacer propiamente dicho o ya sea empleándolos en operaciones auxiliares, como el mantenimiento o la limpieza de los equipos y lugares de trabajo.
Sea como fuere, las condiciones del almacenamiento de productos químicos en las diferentes instalaciones en las que se guardan y manipulan deben cumplir una serie de requisitos para garantizar la seguridad del almacén y para evitar accidentes laborales e industriales.
Riesgos del almacenamiento de productos químicos: la peligrosidad
Una de las características de este tipo de almacenamiento es que habitualmente se almacenan cantidades pequeñas de gran variedad de productos químicos.
Los productos químicos son, con frecuencia, sustancias peligrosas por estar entre sus características alguna o varias de las siguientes: explosivos, comburentes, inflamables, tóxicos y/o corrosivos.
¿De qué depende los riesgos a los que se expone un almacén y sus trabajadores cuando se almacenan productos químicos? De los siguientes factores:
- De la peligrosidad de la sustancia almacenada.
- De la cantidad almacenada.
- De la organización y distribución de los productos en el almacén.
- Del mantenimiento de las condiciones de seguridad del almacén y los productos químicos allí guardados.
- Del comportamiento de los trabajadores.
Además, cuando el almacenamiento de productos químicos es prolongado, esto ya representa un riesgo en sí mismo.
Hay riesgo de explosión por formación de peróxidos inestables o por polimerización de la sustancia en cuestión. También existen riesgo de descomposición lenta de la sustancia con acumulación de gas que puede romper el recipiente.
Así mismo, los envases que contienen productos químicos pueden deteriorarse con el almacenamiento prolongado y romperse, con las nefastas consecuencias que derivan de ello.
Cómo reducir los riesgos cuando se almacenan productos químicos
Reducir el stock de productos químicos y sustancias peligrosas al mínimo y fijar separaciones adecuadas de sustancias incompatibles son dos medidas fundamentales para reducir riesgos y mantener la seguridad del almacén y sus trabajadores.
Stock de productos químicos
Cómo ya hemos indicado, el stock de este tipo de productos debe mantenerse al mínimo operativo puesto que ello disminuye la carga térmica y, por lo tanto, la seguridad de la zona de almacenamiento.
Por lo tanto, es recomendable gestionarlo de manera que las existencias se mantengan durante periodos breves tiempo y se realicen pedidos más frecuentes que de otro tipo de productos. De este modo se evitan los riesgos antes mencionados de un almacenamiento prolongado.
Cómo fijar separaciones de productos químicos en el almacén
En una zona de almacenamiento de productos químicos y sustancias peligrosas es fundamental considerar las instalaciones y la disposición de las sustancias en el almacén.
A la hora de realizar la separación entre familias de productos, es importante tener en cuenta sus características de peligrosidad y sus incompatibilidades.
Por lo tanto, hay que agrupar los productos químicos por características semejantes y separar aquellos que sean incompatibles por su naturaleza y peligrosidad aislándolos o confinándolos del resto. Nos referimos, por ejemplo, a productos tóxicos, cancerígenos, explosivos, pestilentes…
Llevar un registro actualizado de los productos y que estos estén etiquetados correctamente permite, además, identificar y conocer el peligro para prevenir accidentes laborales en el almacén.
